miércoles, 21 de enero de 2009

Parte de tres de la historia realizada en el 2008 octubre

Cuando me sentí mejor regrese a trabajar al hospital en realidad no me sentía mejor, solo quería salir de la casa el encierro me hacía sentir peor. Cada respiro que hacía me hacia una cuchillada que le propinaba a mi corazón. No había podido hablar con Alicia desde que llegue a la casa.
No se porque siempre tengo que ser tan impulsiva, tenía que haber terminado con Randy mucho antes, antes de que ella se cansará de la situación.

Cuando llegó al hospital todos le dieron la bienvenida muy amorosa, todos sus amigos del hospital le preguntaba como seguía, ella tenía muy bueno amigos en el hospital, aunque en realidad no sabían mucho de su vida personal, pero si eran muy buenos compañeros. Ella le contesto que estaba bien, que solo quería volver a trabajar que era lo que más quería.

En la primera hora de estar trabajando llego un paciente; el paciente que le cambiaria la vida, o mejor dicho le dará la segunda oportunidad que ella tanto había pedido. Un joven de unos 30 años, un metro noventa, ojos verdes, piel clara, quien había sido atropellado mientras corría, el conductor que lo había atropellado lo traslado hasta el hospital.

Elizabeth se quedo en blanco al observar el estado en que se encontraba el chico pero inmediatamente lo atendió, tenía un gran golpe en la cabeza, la cadera dislocada y una pierna rota, todavía no sabía si tenía alguna hemorragia interna o algún órgano perforado.
Cuando Elizabeth logra al paciente que se llamaba diego, fue a hablar con el conductor que lo había trasladado al hospital.
Cuando ella llega a la sala de espera donde se encontraba el conductor casi se desmaya, mejor dicho se desmayo, si no es porque la joven la agarro y evito que cayera de lleno al piso de lleno.
¿Que hiciste Alicia Que hiciste, que hiciste seguía repitiendo una y otra vez?- dijo Elizabeth cuando recupero el sentido.

Yo no hice nada, fue otro vehiculo quien lo arroyo yo estaba justo otras de ese carro y cuando vi que paso le grite pero no se detuvo, llame a la ambulancia pero dijeron que iban a tardar unos 15 minutos, el chico no tenia quince minutos, no seré medico pero me di cuenta de eso. Así que como pude lo monte en el carro y lo conduje hasta aquí, yo no hice nada. – Explico Alicia en tono dulce.

Pero Elizabeth sabía que tenía problemas si el joven sobrevivía que lo haría probablemente porque sus lesiones eran graves, pero no tan graves pero si sucedía todo lo contrario iba a estar en problemas muy serios con la ley.
Elizabeth se acordó la primera vez que vio a Alicia, parecía modelo mas o menos su misma estatura es decir un metro setenta, puede ser unos centímetros mas o menos, con la piel blanca y un cutis como muñeca de porcelana, con el cabello suelto del color del sol, con unas pecas en las mejillas que la hacían ver como niña , con unos ojos azules que te hipnotizaban, llevaba me acuerdo un vestido que le llegaba un poco más debajo de las rodillas con unos tacones negros que hacían que sus piernas parecieran que fueron esculpidas por los dioses. En ese momento me di cuenta que tenia problemas.

El papá de Alicia cuando vio a Elizabeth la llamo para que se sentará a comer con ellos, Alicia era nueva en la ciudad, porque hasta hace poco había estado estudiando en el otro lado del mundo.
Desde este almuerzo nació su amistad no fue fácil pero lo lograron, todo el mundo pensaba que eran muy buenas amigas, que eran como esas amigas que parecen hermanas.
El papá de Alicia sospechaba algo pero nunca pregunto hasta ese día que las vio sentada en la oficina hablando sobre lo sucedido. Pero por su manera de tocarse y de hablarse el se dio cuenta de lo que pasaba, el siguió su camino, pero Elizabeth se dio cuenta que el se había dado cuenta de lo que sucedía entre las dos.

Paso un mes y Diego ya estaba mucho mejor no iba a levantar cargo ni nada contra Alicia, pues ella no tenia la culpa.
Aunque en realidad la preocupación que tenia Elizabeth era que iba a hacer ahora que el papá de Alicia se había enterado, ellas habían mantenido su relación en secreto, la disfrazaban de amistad y hasta ahora les había resultado; a Alicia no le gustaba mucho esto pero tampoco hacia algo para cambiarlo, al igual que Elizabeth quien estaba comprometida aunque tenia tres semanas que no veía a su prometido algo que no le molestaba mucho a ella, el rollo de Elizabeth en realidad era su madre y su padre uno católicos puritanos quienes eran homofóbicos desde que ella tenia uso de razón.
Para Alicia todo era diferente pues no había hablado con su padre en más de 10 años cuando murió su mamá y su papá la envió a un internado.

¿Que vamos a hacer Elizabeth?- le preguntó Alicia quien se dio cuenta de que a Elizabeth estaba realmente preocupada por la reacción de ella al observar a su padre viéndolas.

Honey, puedo hablar con él y decirle que guarde el secreto, no hay problema no creo que el vaya a decir nada- le dijo Alicia tratando de calmar el estado de nerviosismo escondido que tenia Elizabeth.

No, Alicia creo que lo mejor es que aceptemos lo que somos ya nos hemos hecho mucho daño con esto que estamos haciendo, todas maneras Darling cuanto mas lo podemos esconder tenemos tres años en esto. Yo quería irme de aquí y montar mi consultorio privado y ser pediatra. – le dijo Elizabeth.
Pasaron dos semanas antes que Elizabeth logrará reunir el valor necesario para hablar con sus padres, quienes tengo que decir no son nada fáciles. Ella sabía que declarar o aceptar lo que ella era iba a significar quedarse sin uno o ambos padres.

Mamá, papá tengo que hablar con ustedes es algo serio, y en verdad lo que menos quería era hacerles daño; pero no pude hacer nada para evitarlo, aunque trate en verdad trate de evitar todo esto.

Papá lo siento mucho, por decepcionarte pero es que soy Gay, tango 3 años en una relación ella es verdaderamente especial, en verdad que la quiero mucho. – le dijo ella en tono suplicante de perdón.

Pero como en que fallamos, nosotros te enviamos a los mejores colegios, a las mejores universidades, las mejores vacaciones, que hicimos mal? – Le pregunto el papá bravo.

Quiero que te vayas, ya no eres más mi hija no te entiendo, como nos puedes hacer esto, es que no significamos nada para ti?- le dijo su madre en medio de su llanto.

Madre, padre en verdad no fue mi intención hacerles daño, los amo.- les dijo cuando agarraba sus cosas para irse por ultima vez sabía que iba a pasar mucho tiempo para que volviera a verlos; si no sucedía lo que ella más temía que era que no volverlos a ver.

Salio llorando de su casa, pero bueno era mejor que ella podía hacer, ¿Porqué, que hicimos nosotras? ¿Por qué el miedo somos iguales a ustedes sentimos y amamos al igual que ustedes? Pensaba ella mientras conducía rumbo a su apartamento ubicado en el centro de la ciudad.

OH Honey, que paso?- le pregunto Alicia cuando la vio que entraba llorando al apartamento.
Que dijeron tan mal te fue?- continuo ella al ver que Elizabeth no le respondía.

Si bueno mal no me fue, me fue exactamente como me esperaba, no me quieren volver a ver, se les acabo el amor, su amor por mi se murió.- Le dijo Elizabeth llorando mientras se preparaba una taza de café.

Darling lo siento tanto, en verdad yo no quería que esto ocurriera, me debiste dejar hablar con mi padre- dijo Alicia mientras abrazaba para consolarla.

Alicia en algún momento tenía que admitirlo, tenemos tres años escondiendo esto cuanto tiempo íbamos a pasar así, y francamente me parece ridículo que nos juzguen y nos parten de la sociedad por algo que decidimos por tratar de ser medianamente feliz, porque simplemente ellos no nos entiendan.- Dijo Elizabeth que ya no tenia fuerzas estaba acostada en la cama, abrazada de Alicia como niña asustada por la oscuridad o por lo que se puede esconder en el closet.

Pasaron 2 semanas antes que Elizabeth pudiera salir de la casa, se había sumido en una depresión profunda, pues había perdido a sus padres, por ser ella lo peor era que no los había perdido en un accidente de transito, por un ladrón o por una enfermedad, sino por los miedos de la sociedad, por no entender que a veces el amor se presenta en esta forma.

Elizabeth logro montar un consultorio privado, luego que saco su postgrado en pediatría, estaba haciendo planes para tener un hijo, pero no estaba segura no quería cometer los mismos errores que había cometido su madre.

Pasaron 6 años para que sus padres volvieran a tener contacto con ella pero era muy tarde ya Elizabeth no quería tener tratos con ellos pues le dijeron cosas muchas cosas que no son fáciles de olvidar, las frases le duelen más que los golpes que en algún momento pudo recibir, y simplemente no puede olvidarlo. Y aunque si los quería y lo adoraba simplemente estaba mejor sin ellos juzgándolas.

3 comentarios:

A.- dijo...

Tengo que leerme esta historia completa. Te prometo que lo haré, pues estuve leyendo un poco de esta parte y me gustó y me dejó intrigada!! En cuanto acaben los exámenes leeré las partes anteriores y luego toda esta. Despúes podré escribir mejor mi opinión :D
No sabía que escribías, jeje ¡Qué bien! Es casual que a mí también me provocó publicar un cuento, pero para que el blog no estuviera muy abandonado jaja. Aunque ya quedan pocas semanas!!

PD: Por fin, ¿para cuándo es que es la boda? jajaja

Un abrazo!!

andrea dijo...

JAJAJA amanda jaj bueno estamos en la misma ya comence clases y he abandonado el blog jajaj bueno la boda jaja es para abril ajaja no vale mentira jajaja no voy a llamar mucho eso no vaya a tener boca de sapo, jaja se imaginan que crueldad ajaja

Mary Lovecraft dijo...

Me gustó mucho la historia, me puse en el papel de las chicas y de verdad tiene qeu ser duro el rechazo hipócrita de unos padres simplemente por ser diferentes (y esto lo sé de buena tinta que caso semejante ocurrió en mi familia)

nosé, me gustaría decir qeu nunca es tarde para esa reconciliación, pero claro, nunca lo viví en primera persona y no sé cómo siente uno en ese caso...

un beso Andrea, tu historia me hizo mucho pensar.

¡¡sigue escribiendo!! ya soy tu fan no te lo dije aún? :D